Hace 30 años que la fuerza la razón, la ilusión de la libertad y el poder de la religión derribaron el muro de Berlín, la última barrera comunista entre la libertad y la anulación del individuo.
Juan Pablo II, la propia ineficacia del comunismo en una Europa capitalista y Lech Walesa, consiguieron que la penúltima locura del comunismo fuera destruida. Lech Walesa fue el presidente del primer sindicato libre en la Polonia comunista, fue arrestado por orden del Kremlin y obtuvo el premio Nóbel de la paz en 1983. En 1989 la presión imparable dentro y fuera de Polonia provocó que se reconociera al Sindicato Solidaridad como legal.
En 1979, año en que nací, Juan Pablo II peregrinó a Polonia y lanzó un mensaje de esperanza, de solidaridad, de valores. El Papa hizo lo que hace un líder del mundo libre, aprovechar su influencia para el bien. Es simple, pero hoy en día conviene que los niños sepan que hubo un Papa que arriesgó su vida por la libertad y por que hoy yo pueda escribir este artículo, y tú puedas leerlo.
Los medios progres os dirán (si dicen algo) que la caída del muro fue provocada por tal o cual decisión del portavoz del Gobierno de la RDA en base a una pregunta del periodista Riccardo Erhman, o que los dirigentes de la RDA conscientes de un cambio decidieron abrirse al mundo blablabla…
El muro comunista de Berlín cayó porque hubo muchas personas que derribaron su muro y decidieron no callar ante la dictadura. Personas como el Papa Juan Pablo II, como Lech Walesa y como tantos y tantos que perdieron la vida intentando cruzar buscando libertad. Derribaron su muro de miedo y apostaron todo al negro. No es posible cambiar nada sin el sacrificio de algunos.
Hoy debes decidir si quieres derribar tu muro y cruzar donde nadie te va a decir lo que debes o no debes pensar. O por el contrario, puedes seguir en tu zona de confort donde la masa te arropa y te dice lo que es bueno, lo que debes criticar y lo que debes aplaudir. Debes decidir si quieres criticar una Ley como la de violencia de género sin que te tachen de asesino. Debes decidir si puedes educar a tu hijo como crees que debes hacerlo, sin que los políticos te investiguen y te acosen. Debes decidir si quieres ser un patriota que se siente orgulloso de lo que sus antepasados han construido, sin miedo a que te señalen por ello.
Derriba tu muro votando, derriba tu muro saliendo a la calle y derriba tu muro ejerciendo tu libertad de expresión, porque si rompes ese muro, el otro caerá. El muro de la dictadura progre no resistirá las embestidas del sentido común.
Hoy hace 30 años que cayó el muro de Berlín, pero todavía tenemos muchos muros que derribar. Empieza por el tuyo, vota por tu libertad, vota por mi libertad, seamos solidarios con España.
Acabo recordando las palabras que dijo el Papa en Varsovia en 1979 «No tengan miedo».
Cierto sin miedo, y hay que darse cuenta que las ideas y propósitos es lo que hay que tener en cuenta, y no se antepongan los beneficios personales de las personas que no ven más que su propio interés, y desaprovechando al que de verdad le importa la lin de todos y la de España.
El Muro fue derribado,pero entonces surgio un Capitalismo atroz,pues perdió el miedo y por ese motivo han vuelto a resurgir Partidos de ultraizquierda que representan esa doctrina
que construyo el Muro,pues dichos capitalistas olvidarón quienes fueron los autores espiri-
tuales del derribo.
Mi tía Merce siempre decía algo parecido, que el Muro mantenía a las multinacionales con el miedo de lo que podría pasar. Al caer el muro ese miedo desapareció y se cometieron abusos…